CONCENTRACIÓN DE CGT IVECO CONTRA EL DESPIDO DE UN COMPAÑERO

La plantilla de IVECO Valladolid, se ha concentrado este jueves 9 de Julio en la puerta de la fábrica que la compañía italiana tiene en la avda. Soria de 14:00 a 15:00 para exigir la readmisión de uncompañero que fue despedido injustamente por la Dirección de la empresa.
La Sección Sindical de C.G.T. ha convocado esta concentración de protesta para que la empresa entre en razones y abandone la actual política de miedo y amenazas a la plantilla, como dice el Secretario General de esta sección sindical en IVECO Valladolid: La clase trabajadora no pude seguir permitiendo este tipo de abusos hacia sus derechos, no podemos permitir que esta empresa siga despidiendo poco a poco a trabajadores por motivos del todo subjetivos, recayendo estos despidos siempre sobre compañeros que exigen sus derechos, en IVECO Valladolid, hay a día de hoy un clima de represión hacia aquellos que no entran en su juego del todo vale, y en C.G.T. no nos vamos a quedar con los brazos cruzados.
La historia del despido de Oscar Pinto viene de lejos, ya con anterioridad la empresa sancionó al trabajador, con un castigo desmedido, por equivocarse a la hora de realizar un inventario, sanción promovida por un superior del trabajador, con el que no había una buena relación personal, meses después ese mismo superior, vuelve a promover otra sanción contra el mismo trabajador, esta vez,
acusándole de no haber realizado unas tareas encomendadas, dichas tareas no eran otras que hacer además de su puesto de trabajo, parte del trabajo de un compañero que estaba de baja, las intenciones del mando superior dieron sus frutos, y a Oscar Pinto se le presentó un expediente sancionador, que acabó con su despido encima de la mesa.
La Sección Sindical de C.G.T. realizará todas las acciones que sean necesarias para que IVECO España recapacite. La actual política de despidos selectivos, de realizar contratos relevos con prejubilados de la fábrica de Valladolid, pero aplicando el relevo a trabajadores de la fábrica de IVECO en Madrid, solo nos está llevando a una paulatina reducción de la plantilla, dejando en la calle a trabajadores sin motivo alguno, y abocando a la incertidumbre de la eventualidad a trabajadores que deberían haber conseguido contratos indefinidos.
El caso de Oscar Pinto, no es un hecho aislado, es parte de una política represiva por parte de IVECO, esta vez le ha tocado a Oscar, el próximo podemos ser cualquiera. La plantilla de IVECO Valladolid es una plantilla seria y responsable que siempre ha cumplido con los objetivos marcados, y se merece todo el respeto por parte de la Dirección de esta empresa, y C.G.T. no va a cesar en su lucha hasta que esto sea así.
En C.G.T. no olvidamos, ni dejamos a nadie atrás, y no vamos a dejar de luchar contra las injusticias, que comete sistemáticamente la Dirección de esta empresa contra la plantilla.
Ahora más que nunca, la clase trabajadora tiene que estar unida y plantar cara ante cualquier injusticia que recaiga sobre un@ de nosotr@s. Tod@s hemos podido sentir la incertidumbre que genera el poder perder nuestro puesto de trabajo, la misma empresa que despidió al compañero Pinto, hace poco nos mostró la amenaza del ERE fantasma, dejando bien clarocuanto les importa nuestro bienestar. Como trabajador@s tenemos que darnos cuenta, que en
la unidad está la fuerza, que esta empresa, ataca de forma individual, uno a uno y poco a poco, porque sabe que ahí está su fuerza, y nuestra debilidad. No podemos dejar a nadie a los pies de los caballos, pensando que nunca nos va a tocar a nosotros, solo cuando la empresa vea que si tocan a un@, saltamos tod@s en su defensa, solo cuando nos encuentre a todos juntos en la lucha, la empresa cambiará su política de miedo y amenazas que sufrimos todos.
L@s trabajador@s no podemos permitir que IVECO España siga jugando con nuestro futuro, no podemos permitir esta política de premios para los pelotas, y castigos para los que defienden sus derechos, no podemos permitir que nadie acabe en el paro, para tapar la basura de un jefecillo. La clase trabajadora no podemos permitir las injusticias.

SALUD Y LUCHA