El Grupo Vocento quiere cerrar la rotativa del Norte de Castilla en Valladolid dejando a 25 personas en la calle. Así la impresión del periódico decano del estado ha pasado en pocos años de su propia impresión en la calle Duque de la Victoria a pertenecer a un grupo nacional con otro tipo de intereses.
El grupo editorial vasco mantiene su política de reducción de gastos y en dos días comunica noticias muy lejos la una de la otra: el beneficio de cuatro millones de euros un día y el cierre de Printolid (planta de impresión que tiene en Valladolid) al día siguiente.
La gran beneficiada del cierre puede ser Calprint, rotativa ubicada en Medina del Campo y cuyo principal cliente es el diario El Mundo, que posiblemente verá así incrementada su cartera de clientes.
En definitiva es una apuesta por lo digital que conllevará además progresivos cierres de delegaciones de Vocento como las de ABC en aquellas comunidades donde no sea rentable.