Se anuncia la apertura de la Academia de la Policía Municipal en la Rondilla sin contar con accesos adecuados y ocupando un patio vecinal que debe mantenerse como zona verde

 

La Academia de la Policía Municipal de Valladolid, cuya entrada en funcionamiento en 2010 anunció el alcalde el pasado domingo durante la celebración de la festividad de la Policía Municipal, sigue careciendo de accesos que garanticen su seguridad y ocupando un patio vecinal del que son copropietarios los vecinos y que, en todo caso, debe mantenerse como zona verde.

Esta dotación policial es una historia continuada de prisas, errores de planificación y huidas hacia adelante por parte del Ayuntamiento de Valladolid comprometiendo una inversión de un millón de Euros.

Este proyecto fue concebido con prisas para presentarlo al Plan E de 2009 obviando inexplicablemente por completo su ubicación dentro de un patio residencial cerrado (en el Grupo XXV Años de Paz, en el barrio de la Rondilla) y con un solo acceso, un pasaje peatonal techado de 4,1 m de ancho-, que es la única entrada de los vecinos de 48 viviendas y por el que circularían todos los vehículos que accedieran a la instalación policial.

Habiéndose previsto en el interior del patio estacionamiento para 186 vehículos, este acceso era manifiestamente ilegal. Como también era ilegal dedicar a aparcamiento prácticamente el 100% de la superficie del patio, que era dotación escolar y debía mantenerse como zona verde. El Ayuntamiento ha querido hacer pasar lo que es un imperativo legal por una concesión a los vecinos: la reducción del estacionamiento a 33 plazas.

Del mismo modo, buscando un acceso alternativo al pasaje peatonal, el Ayuntamiento comunicó a los vecinos en escrito de 15 de octubre de 2009 su propuesta de “sustituir el acceso existente por otro a través de la calle Amor de Dios para garantizar la seguridad en caso de emergencia” . Se deduce que el proyecto inicial lo aprobó el Ayuntamiento sin contar un acceso que garantizara la seguridad [1].

Para ello, en esta huida hacia adelante tratando de “legalizar” y garantizar la seguridad de la instalación, el Ayuntamiento necesita intervenir en una zona del patio no incluida en el proyecto inicial. Y de nuevo, eludiendo el hecho de que los vecinos son también copropietarios de esa zona del patio, se dirige a una entidad financiera, propietaria del inmueble colindante, pidiéndole autorización para abrir ese acceso. Esta entidad le responde que “la superficie solicitada por ese Ayuntamiento no es de nuestra propiedad, no pudiendo ser objeto por nuestra parte de cesión” y que “cualquier actuación sobre el espacio solicitado debe acordarse entre Ayuntamiento y Comunidad de Vecinos” . La Asociación Vecinal Rondilla recuerda que este acuerdo requiere la unánime autorización de los vecinos.

La polémica decisión de ubicar esta dotación policial en el interior de un patio vecinal se ha encontrado con una amplia oposición vecinal. Y no sólo por lo inadecuado del acceso y del emplazamiento desde el punto de vista de la seguridad de policías y vecinos, sino también porque “ocupa” un patio residencial que, según ha certificado el Registro de la Propiedad en agosto de 2009, es copropiedad de los vecinos como también lo es el espacio donde el Ayuntamiento quiere abrir el nuevo acceso. Es un patio vecinal que, incluso estando en vigor el Convenio de Cesión de 1973 que el Ayuntamiento aduce para justificar la intervención, debería mantenerse obligatoriamente como zona verde en su totalidad.

Asociación Vecinal Rondilla